Dos alumnas de Derecho participan como observadoras internacionales en las elecciones de Serbia

El trabajo ha sido desarrollado por la Clínica de Derechos Humanos de Sevilla, formada por estudiantes y egresados de la US

Daniela Domínguez, en la puerta de la Embajada de Serbia.

Dos alumnas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla han participado en la misión de observación electoral Internacional con motivo de las elecciones en Serbia celebradas el pasado 17 de diciembre. Daniela Domínguez y Edda Amalia César han realizado este trabajo en la Embajada de Serbia en Madrid, a través de la Clínica de Derechos Humanos de Sevilla, una ONG dirigida por el profesor de Derecho, Pablo Gutiérrez Vega, e integrada por estudiantes en prácticas y egresados de la US.

El equipo, acreditado oficialmente por la Comisión Nacional Electoral (RIK) como misión internacional, ha llevado a cabo la misión enfocada a evaluar de manera imparcial el proceso electoral, la observación activa de la participación ciudadana y el análisis de la transparencia y legalidad en el proceso. Con una sólida trayectoria en defensa de los derechos humanos, el equipo de la clínica “contribuirá con valiosas recomendaciones a perfeccionar futuros procesos electorales en la Embajada de Serbia en España y al fortalecimiento de la democracia y la transparencia electoral”.

Serbia tiene más seis millones de habitantes y tres millones viven fuera de Serbia, lo que supone que un elevado porcentaje de la población vota fuera y es necesario que esté observada, explica Gutiérrez. El equipo se desplazó a Madrid para observar el proceso electoral de los casi 4 000 votantes que viven en España.

Es el séptimo proceso electoral en el que se embarcan desde que en 2016 comenzara su andadura la clínica legal. Perú, Colombia, Filipinas, Paraguay, Túnez y El Líbano fueron experiencias anteriores en las que evaluaron, con mucho rigor y bajo los máximos estándares de exigencia, cuestiones que van desde las condiciones de acceso a personas con discapacidad, hasta que no haya intimidación, que se preserve el secreto del voto o que no se usen los medios públicos de manera no partidaria. Todo ello, plantea el profesor, es necesario desarrollarlo “de una manera imparcial, objetiva y no intrusiva”.

Acreditados ya para las elecciones de El Salvador

“Tenemos el mismo nivel de acreditación que la delegación del Parlamento Europeo”, asegura Gutiérrez, que explica que ya están acreditados para participar en las próximas elecciones de El Salvador, el 4 de febrero. En esta ocasión se va a realizar de manera coordinada con la Clínica Socio jurídica de la Universidad de Girona. “Participaremos entre 18 y 20 personas en la Embajada de Barcelona y en el Consulado de Sevilla”, afirma. 

Para realizar este trabajo, que requiere de amplios conocimientos en procedimientos electorales y legislación propios de cada país, se basan en un código de conducta, en los estándares internacionales de la Comisión de Venecia y en la experiencia de décadas del profesor Gutiérrez, que ha participado en 16 procesos electorales en todo el mundo.

“He aprendido mucho”, comenta con entusiasmo Daniela Domínguez, “no solo de legislación y papeleo, sino de cómo comportarse para hacer una evaluación lo más objetiva posible”. Por su parte Edda Amalia César, que quiere dedicarse a la diplomacia, asegura que fue gratificante por ver cómo funcionaba una observación.

Clínica de Derechos Humanos de Sevilla

La Clínica de Derechos Humanos de Sevilla trabaja con la filosofía de las clínicas legales, como método de aprendizaje del Derecho basado en casos reales de interés social para provocar la reflexión de los estudiantes. Está formada por comprometidos estudiantes de la Universidad de Sevilla que aportan sus conocimientos y experiencia, no solo en el campo de la observación electoral, en la que son pioneros, sino que se adentra en la lucha en favor de los derechos humanos, con la atención jurídica a personas migrantes en un consultorio semanal (recientemente ayudaron a 23 familias ucranianas a regularizar su situación) o en casos de “litigación de impacto”, en el que tratan casos emblemáticos de violencia de género o de personas que se encuentran privadas de libertad.